2 de enero de 2007

UNA DECISIÓN IMPORTANTE

Primeramente me voy a presentar, me llamo Myriam, tengo 17 años y soy estudiante de 2º de Bachiller.
Como a la mayoría de personas que tienen mi edad nos toca tomar una decisión muy importante, la de decidir hacia donde queremos enfocar nuestras vidas. Probablemente no sabemos que decidir, sea por falta de información o porque verdaderamente aun somos unos "niños". Hay una gran tendencia a ir de lleno hacía esas carreras que tienen una gran salida o están solamente de "moda" porque en su momento mucha gente decidió hacerlas.
La cuestión es ¿cómo saber que es lo mejor? ¿vamos contracorriente o seguimos a la muchedumbre?.
A estas edades y en el curso en que nos encontramos, es muy frecuente que cada dos minutos alguien nos pregunte si sabemos YA a lo que nos queremos dedicar. Lo más probable es que contestemos con un NO rotundo, pero cuando la respuesta es afirmativa viene seguidamente otra pregunta, ¿y qué quieres estudiar? aquí esta el dilema.
En lo que llevamos de año (ahora año pasado), mínimo cien personas me han realizado esta pregunta y cuando proclamo mi respuesta la cara de indiferencia es la protagonista. Hasta hace cuatro meses mi respuesta era clara, FILOLOGÍA CLÁSICA, la mitad de personas me preguntaban de qué se trataba esta carrera , y la otra soltaban algún comentario absurdo pensando que cabe la mera posibilidad de que preste atención a sus palabras.
En los tiempos en los que nos encontramos, es difícil ir a contracorriente ya que nuestra sociedad se basa en unas normas preestablecidas. Cuando digo que quiero dedicarme a la enseñanza del latín y griego suelen decirme ¿ y para qué ? ¿ esas lenguas ya están muertas no?, ¡no se utilizan! es ahí donde se demuestra la incultura de este país y no solamente eso si no que hoy en día ya no hay ni un mínimo respeto hacia esa gente que se señala con el dedo llamándoles "bichos raros" simplemente porque tienen la sensatez de dedicarse a una profesión que les provoca un gran placer.
Por último, me gustaría decir que son muchas las personas que me han hecho dudar de mi vocación y que han conseguido que me plantee el hecho de realizar otra carrera, pero aprovecho desde aquí para decir que sus esfuerzos para hacerme cambiar de opinión han sido en vano y que no hay otra pasión en mi que se pueda igualar con la que siento al lado de MIS LENGUAS CLÁSICAS.
¡Buenas noches!

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Tienes tooooda la razón. Me encuentro en la misma situación, mismos comentarios y mismas caras de indiferencia. Pero da igual, ¡ahora nos podemos dar soporte mutuo! Un abrazo y adelante con tu blog. Un placer haberte conocido, de verdad, siempre se agradece tener alguien con quien se comparta algo como el gusto por las clásicas!

Anónimo dijo...

Así se habla. Estoy igual que tú, todo el mundo preguntando qué quería hacer y yo que no sabía hacia dónde tirar. Hace relativamente poco me he decidido por la Filología Clássica (más por griego que por latín) y entre la poco gente a la que ya se lo he dicho se han visto reacciones de todos colores: caras de sorpresa unos, comentarios del estilo "pero eso es muy freaky, no?"(y eso alguien que no es que sea precisamente el más indicado para ir diciendo freaky a la gente), etc.

Es exactamente como lo planteas: tienes que escoger entre tú y la masa, entre el individuo y el rebaño. Si sigues a la masa serás normal. Estarás frustrado como individuo, quizás, pero con el futbol, la tele y demás opiácidos te será fácil de olvidar. Es la via fácil, claro. Pero yo creo que para vivir así no vale la pena vivir. Vivir sólo vale la pena si me puedo realizar como individuo, si puedo vivir de acuerdo conmigo mismo, siguiendo mis principios y disfrutando de mis placeres. Así es como lo pienso hacer, y creo que es lo más próximo a la "felicidad", si es que esto ha existido nunca.

Ha sido un placer descubrir tu blog, te seguiré comentando.

Un abrazo,

Pau

Anónimo dijo...

Buena pinta tiene tu blog. No le des muchas vueltas a la cabeza, y ve a tu rollo. Eso de "bichos raros", es "el miedo a lo desconocido".
Animo
Atentamente
Iaenus

Anónimo dijo...

Muy bien dicho, somos pocos pero somos buenos. Ya lo decía Cicerón: Omnia praeclara rara .

Vale!

Luis Inclán García-Robés dijo...

Hola:
He llegado aquí desde el blog de Nausicaa, y veo que compartes su pasión por las clásicas. Te animo a seguir esa vocación, que te dará muchas alegrías. Ya veo que han hecho comentarios algunas personas conocidas, y te repito lo que dice Blai: ¡pocos... pero buenos!
No hagas caso de la gente que te quiere apartar de tu camino. Si quieres, puedes.
Yo llevo más de 35 años enseñando latín y griego y aún no me cansado.
Un saludo muy cordial. Luis.

Luis Inclán García-Robés dijo...

Hola un altre cop,
acabo de rebre un llarg comentari a un post 'antic' del meu blog, que et recomano que miris. A veure si tens alguna idea per rebatre-li els arguments. Jo també pensaré quelcom.
Es troba a http://doceoetdisco.blogspot.com/2006/11/estudiar-clsicas.html
Una abraçada. Lluís.

Unknown dijo...

Hola a todos. Me presento: soy estudiante de Filología Clásica en la UCM de Madrid, en 5º año ya. No sabéis cómo entiendo esas palabras, ver el rostro de indiferencia o aversión que provocan esos dos términos que tanto significan. Filología se usó por primera vez en el siglo III/II a.C. en Alejandría, en época helenística, con el mismo sentido que le damos nosotros. Clásica: ya lo usa Cicerón, creo recordar para distinguir el rango social. Y luego se ha consagrado hasta dar lo que conocemos.

Mucho ánimo en la continuación del blog, que seguiré con más atención por ser estudiante y entrar dentro de nada en la universidad.

Hace poco me hice mi blog en el que voy a tratar varios aspectos de la carrera y el mundo clásico, y para ello espero contar con vuestro apoyo e ideas, que siempre son útiles, porque la edad da a cada uno una visión diametralmente distinta y a tener en cuenta. Mucho ánimo, y suerte en el curso.

sergi dijo...

Benvinguda al club!

Tot i que l'actualitat no ho desmereix, sempre s'agraeix que per darrere animoses persones com tu i alguns dels comentaristes de la teua quinta ens garantesquen un gloriòs i clàssic futur.

Animum plurimum!